Cuando nació tu bebé lo que más te preocupaba eran los cólicos, la lactancia, el sueño…
Y comenzó a crecer (demasiado rápido, por cierto) y algo nuevo e inesperado, que pensabas que a ti no te pasaría, hace acto de presencia por primera vez…
¡Las rabietas han llegado!
Pasan a suceder con demasiada frecuencia. Y estas comienzan a ser un problema en casa.
Estas situaciones de ira provocan sufrimiento a todos y una gran distancia entre tus hijos y tú y no saber cómo gestionarlas te frustra….
Seguro que has buscado alguna manera de eliminar las rabietas sin muchos resultados…
Siento decirte que eso es imposible, son parte del proceso de desarrollo y esta etapa es importante porque establece las bases de la gestión de sus emociones.
Pero no te preocupes, no todo está perdido.
Es importante que tengas información para acompañar a tu hijo en su crecimiento y desarrollo, sin olvidar que es un niño y que todo, todo, va a pasar… Lo más importante es acompañarlo en estos traumáticos momentos sin perder la calma.
Te traigo una muy buena noticia…